Descripción
La realidad no es un don de los dioses; no es una mala jugada del destino; es un camino descrito por el hombre; es su obra. A partir de su inteligencia y capacidad creadora de ver la esencia posible en lo dado; interpreta; inventa; reinventa y amplia la realidad. Si bien puede tomar caminos peligrosos; también con este posible convertido por él en realidad; hace más habitable lo existente. Allí reside su libertad.